LA RESPONSABILIDAD EMOCIONAL

LA RESPONSABILIDAD EMOCIONAL

La responsabilidad emocional nos lleva a hacernos cargo de nuestras emociones, de cómo nos sentimos o compartamos. De saber cómo ser responsables con nosotros mismos, con todo lo que somos.

Estamos acostumbrados a responsabilizar a los otros de nuestras emociones, es decir, de cómo nos sentimos, al igual que nos responsabilizamos de cómo se sienten los demás. Poniendo el foco fuera en lugar de focalizarlo en nosotros. Muchas veces nos echamos la culpa de actos que son culpa de otros, tenemos que aprender a analizar los sucesos para gestionarlo de la mejor manera, no distorsionemos nuestras emociones por no buscar problemas, sé responsable contigo mismo.

La necesidad de asumir el control

 

Responsabilizarnos de las emociones de los demás puede ser una gran carga para nuestro desarrollo individual. Asimismo, es igual de irresponsable desplazar el malestar personal proyectándolo sobre los demás.

  • Debemos, en esencia, dar forma a una adecuada responsabilidad emocional para asumir el control de cada cosa que nos sucede. Así, estudios como el llevado a cabo en el departamento de neurociencia cognitiva del College London nos señalan que cuando aplicamos esta estrategia, mejoramos nuestra salud psicológica.
  • Pensemos en ello: ¿Cuántas veces has expresado “Tú me enfadas «o “Me haces sentir mal”? Es momento de aprender a gestionar tu rabia, tus celos, tu ira o tu tristeza, porque las respuestas no están fuera créeme, sino en ti.

Tengo la responsabilidad de entender cómo me siento

Primero, acepta que existe la posibilidad de que estemos proyectándonos en el otro. No es una tarea fácil, si tenemos en cuenta que si lo hacemos, es porque de momento no somos capaces de asumirlo y lo trasladamos fuera.

Por ello, tendemos a resistirnos a asumir la responsabilidad de nuestras reacciones. Es necesario por tanto tomar conciencia de ello.

Acepta las emociones negativas pero hazte cargo de ellas

Tienes tanto derecho a molestarte por algo que haya ocurrido como cualquier otra persona, no pasa nada. Ahora bien, si te haces cargo de ello, todo será más satisfactorio, porque te encontrarás en un proceso de descubrimiento y crecimiento personal, en el que cada malestar originado ya sea en relación con los demás o con el contexto, será una oportunidad para seguir conociéndote.

De lo contrario, siempre estaremos a expensas de los demás y de las circunstancias, de todo, menos de nosotros mismos. Y esto, también sucede cuando hablamos de los que están a nuestro alrededor.

FUENTE: BLOG «LA MENTE MARAVILLOSA»

👉 ¡Tu salud nuestro compromiso! 🤝

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

× ¿Cómo puedo ayudarte?